Diferencia clave: el abuso del alcohol es el consumo de grandes cantidades de alcohol sin tener en cuenta las consecuencias. La dependencia del alcohol o el alcoholismo es una enfermedad médica que describe a una persona que es adicta al alcohol.
El abuso del alcohol es el consumo de una gran cantidad de alcohol sin tener en cuenta las consecuencias. Una persona que abusa del alcohol lo consume con frecuencia y en cantidades copiosas. Cada vez que la persona bebe, puede consumir más de 2 o 3 bebidas. Según el Centro de Control de Enfermedades (CDC), las bebidas alcohólicas diarias no deben exceder más de 1 bebida para mujeres y 2 bebidas para hombres.
Un abusador de alcohol tiene hábitos peligrosos de consumo de alcohol, que pueden dañar sus relaciones con la familia, amigos, compañeros de trabajo. Incluso puede causar problemas como faltar al trabajo, problemas legales, DUI, etc. El abuso de alcohol también puede dificultar el juicio de una persona y puede hacer que una persona deprimida se suicide. El abuso del alcohol es considerado como un trastorno mental que puede resolverse con intervenciones, terapia y centros de rehabilitación. El abuso continuo de alcohol conduce a la dependencia del alcohol o el alcoholismo.
La dependencia del alcohol o el alcoholismo es una enfermedad médica que describe a una persona que es adicta al alcohol física o mentalmente y continúa consumiendo alcohol a pesar del caos en su vida debido a la bebida. El término 'Alcoholismo' fue acuñado por el médico sueco, Magnus Huss, alrededor de 1849. Este término reemplazó el término 'Dipsomanía' que significa "deseo intenso de alcohol". Un alcohólico o una persona que depende del alcohol anhela la bebida, incluso si ellos no lo quieren No pueden vivir sin beber y si pasan largos períodos de tiempo sin alcohol, enferman violentamente.
- Tolerancia aumentada
- Síntomas de abstinencia o síndrome de abstinencia de alcohol clínicamente definido
- Usar en cantidades mayores o por períodos más largos de lo previsto
- Deseo persistente o esfuerzos fallidos para reducir el consumo de alcohol
- Se gasta tiempo en obtener alcohol o recuperarse de los efectos.
- Las actividades sociales, ocupacionales y recreativas se abandonan o reducen debido al consumo de alcohol.
- El uso se continúa a pesar del conocimiento del daño relacionado con el alcohol (físico o psicológico)
El alcoholismo es considerado como una enfermedad y no una falta de fuerza de voluntad. Al igual que otras enfermedades, el alcoholismo sigue un curso que se puede predecir. Las personas que tienen alcohólicos en la familia son más propensas a convertirse en alcohólicos. Cada persona reacciona al alcohol de manera diferente en función de ciertos factores como la edad, el sexo, el origen étnico, la condición física, la cantidad de alimentos consumidos antes de beber, etc. y grupos de autoayuda.